Con respecto a los posibles efectos

Luque: La elección de la sede para albergar la próxima Copa del Mundo femenina que se llevará a cabo en el 2023, y de la que Colombia es país candidato como representante de Sudamérica, ha creado polémica desde que se dio a conocer el balance del comité técnico de los países que aspiran a acoger el máximo evento a nivel de selecciones de la categoría. Y en donde Colombia no fue muy bien calificada, hecho que llevó a la Confederación Sudamericana de Fútbol junto a la Federación colombiana a reaccionar con una carta contundente dirigida a la FIFA.

La carta muestra una clara inconformidad con el informe presentado por la portuguesa Fatma Samoura, Secretaria General del máximo ente rector del fútbol mundial. Quien sacó conclusiones adversas y discriminatorias sobre el país y la actualidad que vive.

En el comunicado se manifiesta que el terrorismo a nivel nacional se ha disminuido de forma considerable, aunque sigue existiendo preocupación con respecto a los posibles efectos de la seguridad por parte de los países candidatos. Sin publicar estadísticas, la Conmebol y la Federación están de acuerdo en que es dolorosa a nivel nacional y continental ya que solo se apoya en prejuicios afincados que desconocen los procesos de paz, que llevan muchos años avalados por varios organismos internacionales. Indicando que el tema de seguridad es tratado con “viveza” y revela ignorancia con relación a la situación que se vive en el país.

El documento, que también menciona el tema de salud, en donde también genera indignación está firmado por Alejandro Domínguez y Ramón Jesurún, máximos dirigentes de los entes implicados.