Desde julio de 2013, época en la que Ancelotti se
incorporó como adiestrador del combinado merengue, la Fiscalía admite que a lo
largo del período fiscal en el que permaneció el estratega no obtuvo
rendimientos por actividades algún otro técnico. Ya que hasta hace tres
temporadas firmó con el Bayern Múnich de Alemania, por lo que su fuente de
ingresos principal se dio con el Real Madrid.
Aunque, la Fiscalía sostiene
que con el ánimo de eludir sin justificaciones sus obligaciones financieras, Ancelotti excluyó los rendimientos de sus derechos de
imagen. Además de los derivados de su relación contractual con el 13 veces
campeón de Europa, ó los percibidos a consecuencia de los contratos
relacionados con patrocinadores.
La denuncia advierte que, con el objetivo de ocultar
su identidad, el estratega italiano se escondió de un complejo con montura de
sociedades instrumentales, con empresas que lo favorecen. Y que cuya finalidad
fue la de evitar que la Agencia Tributaria conociera al beneficiario de los
rendimientos procedentes de la explotación de sus derechos de imagen.
Y finalmente, la denuncia afianza que Ancelotti firmó su contrato con el hoy
Subcampeón de España un contrato privado en donde aparentemente cedía sus
derechos de imagen a la compañía Vapia Limited por un período de diez años. Y
adquiriendo por una suma de 25.000 Euros.
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