No serán los mismos

 

Por Andrés Vargas Correa

Se ha visto en las últimas semanas, que equipos como Junior, América, entre otros han tenido ciertas diferencias con referentes, líderes, cuerpo técnico y demás integrantes de los equipos en referencia a las nuevas condiciones salariales de ha llevado la pandemia, y con ello, cierta incertidumbre pues las organizaciones tendrán que cambiar sus proyectos deportivos a mitad de camino.

Por lo general y más aún en una liga como la colombiana, los proyectos deportivos están encaminados a los resultados deportivos inmediatos o en el mejor de los casos proyecto con una duración anual, por eso, el cambio constante de cuerpos técnicos y restructuración de equipos, ya que no se construyen bases y tampoco se tienen ambición para generar proyectos a largo plazo.

 

En el caso de los dos últimos campeones Junior y América sus cuerpos técnicos han estado en la palestra de la opinión pública y no por su trabajo pues mal o bien están dentro de los ocho de la liga Betplay y aunque Junior aún no ha ganado en libertadores, pero está allí, América en su grupo, pelea por ser el mejor representante de Colombia en esta edición.

 

Sus técnicos Comesaña y Guimaraes respectivamente han sonado por temas ajenos al balón, el primero por ser un hombre mayor de 70 años, el cual en estos momentos se le impide la salida a vía pública por pertenecer a un tipo de población vulnerable al COVID-19 y en el caso del segundo las directivas del cuadro escarlata aluden no tener dinero para solventar el sueldo del director técnico brasileño, y no sostener a un hombre que ha colaborado al resurgir del América.

 

En el desarrollo de ambos casos, Comesaña impuso una acción de tutela al gobierno nacional alegando su derecho al trabajo sin el respaldo del cuadro tiburón, por su parte Guimaraes se encuentra en Costa Rica sin posibilidad alguna de un pronto regreso al país, pues aquí ya suenan nombres para dirigir al cuadro escarlata.

 

Una de las cosas que se espera con la reanudación del fútbol es la posibilidad de mantener los proyectos deportivos iniciados en enero 2020, sin embargo, entre sueldos, formatos de competición, torneos internacionales, transferencias de jugadores, se ve un poco complicado las sostenibilidades de esos proyectos.