Celis adelantó que ya está un poco más tranquilo. Porque se comenzó a “normalizar el panorama” en territorio argentino, en donde llevan cerca de tres meses de cuarentena. Y en lo personal, lo dejan ir a la sede del elenco sabalero, en donde puede practicar, hacer trabajos con el balón, y que la ansiedad que tiene la va controlando de esa forma.
En lo que tiene que ver con el campeonato. Admite que
para los jugadores fue un alivio porque estaba peleando con el plantel el tema
del descenso, que era un enemigo, pero que les trajo mucha tranquilidad. Y que
a nivel personal le cayó muy bien porque evolucionó de gran forma, que se vio
reflejada en la última resonancia magnética que le hicieron y el cuerpo médico
lo autorizó para entrenar normalmente. Para poder volver a la actividad competitiva.
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