La escuadra de La Vieja
Diosa llegó al partido fortalecida por el triunfo obtenido en la última jornada
como local ante el Napoles. Mientras que el grupo Rojiazul, también llegó para
ratificar el buen resultado que obtuvo como forastero ante el Bolonia. Con
intensidad arrancó el partido y sorprendiendo a propios y extraños con un
potente remate de Giovanni Simeone pierna derecha a los 13 minutos para
sorprender en un rebote al guardameta Marco Sportello, y que terminó anulado
por el árbitro Federico La Penna porque la pelota le pegó en la mano con la
ayuda del VAR.
Presionando desde territorio
contrario, La Vieja Diosa con el alemán Mario Pasalic buscó los espacios.
Mientras que los Rojiazules lo intentaron con Simeone, y la recompensa llegó
por intermedio de Muriel quien castigó y convirtió, abrió el marcador a los 27
superando la resistencia del guardavalla Alessio Cragno. En una jugada que fue
decretada como pena máxima, tras una falta que cometió el zaguero central Andrea
Carboni que salió expulsado sobre el volante de armado Ruslan
Malinovsky. Completando 16 goles en la temporada.
En el segundo tiempo, el
Atalanta no bajó la intensidad, atacando más por el centro aprovechando el
espacio dejado en territorio Rojiazul. El Cagliari trató de destaparse por los
costados mirando de qué forma podía conectarse con Simeone.
Zapata ingresó por Muriel a
los 61, para dejar un poco más compacta la zona de ataque a pesar de tener la
ventaja con superioridad numérica. Tenía la libertad para inquietar de nuevo el
área defendida por Cragno, pero le faltó profundidad a la hora de rematar.
Con este nuevo éxito la
institución de La Vieja Diosa es tercera con 63 puntos. Y sigue caminando para
disputar la Liga de Campeones la próxima temporada.
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